ASI SOMOS

Algunos nos llaman adúlteros, nosotros preferimos definirnos como:

católicos por el bautismo, comprometidos por la fe, independientes porque nadie nos ha lavado el cerebro, divorciados por que las circunstancias de la vida nos han llevado a un fracaso y en nueva unión porque creemos firmemente en la familia como célula básica de la sociedad y hacemos de la Comunión Espiritual nuestro alimento del alma y porque nos sometemos al Fuero Externo.

Todo esto aunque los retrógrados y preconciliares nos digan simplemente ADULTEROS.

julio 20, 2014

RESPUESTAS A UN PERIODISTA ESPAÑOL (parte 12)

¿Tienen la impresión  que el divorcio se contempla, en ocasiones, como un capricho, como un no tener paciencia, como un no saber aguantar...?

Ninguna opción ni comentario debe darse por descartada, pero el divorcio es un tema trascendente, es una ruptura muy severa, es un fracaso, es una obra inconclusa y aunque algunos puedan sentir cierta liberación, la sensación que queda es realmente no recomendable.

Bajo todo punto de vista el divorcio es negativo, ya sea considerando el aspecto económico, el sentimental, la relación con los hijos, con los amigos comunes, etc., no aporta nada bueno,
de todos modos ante situaciones límites a veces no queda más remedio, en ese momento y a pesar de todo lo antedicho, si se siente que no hay más posibilidades, ni más fortaleza para continuar ni siquiera intenciones de realizar más intentos, obviamente lo mejor es dar por terminada la relación y dar comienzo a otra etapa.

Este concepto (el del sufrimiento) escasamente desarrollado, es aplicable para todos los que viven en la situación, católicos y no católicos y dentro de los católicos los comprometidos y los no comprometidos.

Los no católicos y los católicos que lo son sólo porque accedieron al bautismo tienen un conflicto de orden civil, económico y afectivo y los que tienen un compromiso fuerte con la Iglesia, mientras que cumplan con los Mandamientos tampoco tienen problemas, el tema surge cuando el derrotero se aleja y culmina cuando al cabo de un tiempo, en algunos casos, se formaliza una nueva relación, y haciendo uso de las leyes civiles se accede a un nuevo compromiso matrimonial.



DESDE ESTOS PAISES NOS VISITAN. A POCO LO IREMOS POBLANDO (Este lo iniciamos el 26/11/13)