SI LA PRUDENCIA SE CONVIERTE EN INACCION, ES COBARDIA

Según publica  Clarín, el periódico de mayor circulación de América latina, el papa le habría dicho a un juez argentino la frase que da titulo a este Post.

Supongamos por un instante que sea cierto, más allá del alcance real de tal recomendación y a partir de esto elaboraremos nuestro análisis.

La problemática de los católicos divorciados en nueva unión fue durante mucho tiempo un tema subyacente, para no decir tabú que quizás a algunos con oídos muy sensibles les pueda producir otitis y ahora divide aguas, pero nadie o casi nadie niega su existencia como tampoco la necesidad de hacer algo.

Durante ese tiempo nos sentimos un poco solos en la prédica de que algo se debía hacer, que de tanto barrer bajo la alfombra un día alguien iba a pisar fuerte y

la tierra se desparramaría de un modo lamentable, eran tiempos en los que nos quejábamos tanto de los cultores del inmediatismo del “llame ya” como de los que, como el tero, cacareaban en un sitio y ponían los huevos en otro y esos pensamientos nos trajeron más sinsabores que alegrías y otras cosas tan lamentables que es mejor ni recordar.

Fueron años de poner blanco sobre negro a los que se montaron chiringuitos de distracción asimilando sacramentados con vueltos a casar, pensando que metiendo todo en la misma bolsa los problemas se diluían y sin embargo hoy hacen piruetas para justificar sus actitudes anteriores y adecuarlas a los nuevos vientos, quizás por ahora soplan desde El Vaticano. 

Los que abiertamente supeditaron todo a una cuestión de conciencia, planteo con el que NO coincidimos NI juzgamos, merecen todo nuestro respeto y nosotros que sosteníamos y sostenemos el sometimiento al Fuero Externo con sentido crítico, tenemos bastantes moretones, recibidos por diestra y siniestra, ya que nos han dado tanto como para que tengamos y guardemos.

Sin distinción de origen o referencia, tanto ultra conservadores como eximios pseudos progresistas, ambos extremos unidos en extraña simbiosis de pensamiento único, talibanes de la moral ajena, apóstatas de la misericordia, poseedores y utilizadores del doble rasero, y aunque algunas vez nos sentimos tentados a  arriar las banderas una fuerza interior nos impulsó a seguir y seguimos firmes en nuestras convicciones,

Tiene razón el papa (si es que dijo lo que dicen que dijo) al sostener que: “Si la prudencia se convierte en inacción, es cobardía” y nosotros hemos sido cualquier cosa menos cobardes.

Hemos explicitado sin ambigüedades las actitudes de aquellos que tatuándose en el corazón la Familiaris Consortio, en voz baja y hasta con el apoyo de algunos con almidonados que dejaron el cleriman por la guayabera, propiciaban el acceso a la Eucaristía en los sitios donde no se los conociera, para cumplir por la frase de “no provocar escándalo”, doctorando en hipocresía y fariseísmo a los prisioneros de la new age.

También, sin pelos en la lengua ni guantes en los dedos para teclear hasta manifestamos el hartazgo nuestra discordancia con los que intentaron durante bastante tiempo discriminar, haciendo creer que la problemática de los divorciados podía soslayarse y que con hacerla pasar desapercibida simplemente  mezclándola con los matrimonios que carecían de la problemática el conflicto se acababa.

Si no fuera porque a los ilusos los separa una mano de pintura de los malintencionados, pensaríamos que todo ese trajinar fue realizado adrede, mientras tanto los alcanza el beneficio  de la duda.  

A pesar de los intentos de amedrentamientos, como si hubiéramos imaginado la frase de Francisco no fuimos cobardes, denunciamos lo denunciable, expusimos con tanta vergüenza ajena como decepción las imposiciones desparejas de muchos Tribunales Eclesiásticos, renegamos de aquellos que amparándose en la justicia olvidaron la misericordia y también de aquellos que con mitra o sombrero de copa tuvieron y tienen una actitud deletérea que hasta provoca el deleite de los preconciliares al juzgas aunque sean progres al juzgarse.

Por todo esto desde La Barca propiciamos la 1º Peregrinación Mundial de Católicos Divorciados en Nueva Unión en El Vaticano el próximo 5 de Octubre para acompañar a TODOS nuestros obispos en el inicio de la IIIª Asamblea Extraordinaria del Sínodo.

Ciertamente el papa tiene razón, cuando la prudencia se convierte en inacción, es cobardía y en La Barca ni fuimos ni somos inactivos y de eso dan muestra elocuente nuestros casi 700 Posts y las visitas que recibimos desde 73 países, pero mucho menos cobardes, ya que cumpliendo las exigencias del Magisterio no hemos dejado pasar oportunidad sin reclamar por una solución inclusiva, contenedora, aggiornada y misericordiosa.

Rezamos por el papa, queremos pastores con olor a ovejas, mientras tanto seguimos HACIENDO LIO