ASI SOMOS

Algunos nos llaman adúlteros, nosotros preferimos definirnos como:

católicos por el bautismo, comprometidos por la fe, independientes porque nadie nos ha lavado el cerebro, divorciados por que las circunstancias de la vida nos han llevado a un fracaso y en nueva unión porque creemos firmemente en la familia como célula básica de la sociedad y hacemos de la Comunión Espiritual nuestro alimento del alma y porque nos sometemos al Fuero Externo.

Todo esto aunque los retrógrados y preconciliares nos digan simplemente ADULTEROS.

septiembre 29, 2008

MATRIMONIOS EN CRISIS


La Agencia Informativa Católica Argentina, informa hoy a través de su web de la recepción de SS Benedicto XVI a un movimiento que se dedica a ayudar a matrimonios en crisis.

Las crisis matrimoniales purifican y se pueden superar

Ciudad del Vaticano, 29 Set. 08 (AICA)


El movimiento “Retrouvaille” (Reencuentro) se dedica a ayudar a los matrimonios en crisis

El papa Benedicto XVI explicó que cuando un matrimonio atraviesa por una crisis, los esposos se encuentran ante una oportunidad que, guiados por María y con la ayuda del Señor, "les ayudará a crecer", y permitirá que el amor se purifique, madure y se refuerce.

Al recibir el pasado viernes 26 de septiembre en Castel Gandolfo a 300 participantes del encuentro internacional del movimiento “Retrouvaille” (Reencuentro), cuyo objetivo es ayudar a los matrimonios en crisis, el Santo Padre señaló que cuando los esposos "atraviesan momentos difíciles o –como les demuestra la experiencia– incluso se han separado, si confían en María y se dirigen a Aquel que ha hecho de los dos 'una sola carne', pueden tener la certeza de que aquella crisis, con la ayuda del Señor, les ayudará a crecer, y que el amor se purificará, madurará y se reforzará".

El Papa afirmó que esta iniciativa nació en 1977 en Canadá, gracias “a la intuición de los cónyuges Guy y Jeannine Beland de ayudar a las parejas en crisis a afrontarla por medio de un programa específico, cuyo fin es reconstruir sus relaciones, no como una alternativa a las terapias psicológicas, sino como un camino distinto y complementario”.

“Ustedes -dijo Benedicto XVI- no son unos profesionales; son esposos que a menudo vivieron en primera persona las mismas dificultades, las han superado con la gracia de Dios y el apoyo de “Retrouvaille” y han advertido el deseo y la alegría de poner, a su vez, la propia experiencia al servicio de los demás. Entre ustedes hay varios sacerdotes que acompañan a los esposos en su camino”.

El Papa subrayó que las graves crisis conyugales “son una realidad que tiene dos caras. Por una parte se presenta, especialmente en su fase aguda y más dolorosa, como un fracaso; esta es la cara negativa”. Sin embargo, dijo, “existe otra cara, que con frecuencia desconocemos, pero que Dios ve. Cada crisis -nos lo enseña la naturaleza- es un paso a una nueva fase de vida. En el momento de la ruptura, ustedes ofrecen a la pareja una referencia positiva en la que confiar frente a la desesperación”. De este modo, “sus encuentros ofrecen una ayuda para no perderse del todo y superar poco a poco la situación”.

Recordando el episodio de las bodas de Caná, el Santo Padre señaló que el “buen vino” que se conserva hasta el final “es símbolo de la salvación, de la nueva alianza nupcial que Jesús vino a realizar con la humanidad”. En este contexto, afirmó que cuando los esposos “atraviesan momentos difíciles o -como les demuestra la experiencia- incluso se han separado, si confían en María y se dirigen a Aquel que ha hecho de los dos “una sola carne”, pueden tener la certeza de que aquella crisis, con la ayuda del Señor, les ayudará a crecer, y que el amor se purificará, madurará y se reforzará”.

“Ustedes realizan un servicio ‘contra-corriente’. Cada vez que una pareja entra en crisis encuentra muchas personas que le aconsejan la separación. También a los cónyuges que se han casado en el nombre del Señor se les propone con facilidad el divorcio, olvidando que el ser humano no puede separar lo que Dios ha unido”.

El Papa terminó haciendo hincapié en que para realizar esta misión debían “alimentar continuamente la vida espiritual, poner amor -dijo- en lo que hagan, para que al estar en contacto con realidades difíciles, no se les agote esperanza ni se reduzca a una fórmula”.+

DESDE ESTOS PAISES NOS VISITAN. A POCO LO IREMOS POBLANDO (Este lo iniciamos el 26/11/13)