A continuación el pensamiento de Enrique (Kike) desde Perú, como respuesta a nuestro comentario insertado en su blog FUERA DE BROMAS (www.fueradebromas.blogspot.com)
El tema de las personas católicas divorciadas lo reconoceré siempre como un tema delicado y digno de atención; y cuando estas personas deciden volver a unirse con otra, requieren aun más cuidado y atención, y se convierte en un tema aun más delicado.
Felicitaría su iniciativa de crear una web y una asociación para reunirlos, si encontrara en ella información que dejara bien en claro que no es este un camino promovido por la Iglesia ni alentado por su doctrina.
Felicitaría su iniciativa si dejaran en claro que se mantienen de acuerdo con la doctrina que afirma que no se puede permitir la unión de una persona con otra si una de ellas ha recibido el sacramento del matrimonio mientras su consorte está aún con vida.
Felicitaría su iniciativa si dejaran en claro no solo que están de acuerdo con ello, sino que condenan cualquier opinión contraria por desobediente, pues se trata de un tema no disciplinar sino doctrinal instituido por el mismo Señor.
Sin embargo, en su blog no he encontrado nada de esto.
Por supuesto que estoy de acuerdo en que las personas en esta situación (católicos divorciados vueltos a unir) existen, y constituyen un drama digno de atención de la Iglesia, y digno de una pastoral adecuada ---que hasta donde conozco, no existe---.
Estoy de acuerdo también en que se pueda ---con mucha prudencia--- crear asociaciones para apoyar a estas personas y brindarles apoyo pastoral adecuado.
Pero no estoy de acuerdo en que se formen asociaciones que contravengan la enseñanza católica al respecto o que no sean claras en su rechazo a opiniones contrarias a ella.
Por estas razones, no puedo recomendar su blog.
Kike
www.fueradebromas.blogspot.com
COMENTARIO:
Nuestras respuestas en los 2 post siguientes.
Estimado Kike: le recomiendo profundizar mucho más en la doctrina de Jesucristo, de la cual habla y parece conocer muy bien.Pero sabemos que con las cosas del Señor nunca hay suficiente ciencia. Una lectura orante de la Biblia siempre "abre" (nunca cierra!) la mente y el corazón para que éstas alcancen las dimensiones de Cristo.Se la recomiendo muchísimo. Sólo después de este ejercicio espiritual estaremos capacitados para comprender situaciones nuevas y buscar soluciones acordes con la realidad, que nunca deben ser soluciones "ideales" que no puedan ponerse en práctica. El Magisterio de la Iglesia no siempre es "realista" en este tema, y propone caminos imposibles de cumplir, porque muchas veces habla "en general", y no ve las cuestiones particulares, humanas y afectivas. Por otro lado, hay que señalar que el "drama digno de atención" del cual usted habla al referirse a los divorciados en nueva unión, en la mayoría de los casos no es tal sino para los demás,porque en general, las nuevas parejas formadas viven "felices" y no están dispuestas a separarse, pues comprenden muy bien que donde hay amor, hay un "signo" de Dios", un "sacramento" (aunque algunos se escandalicen por esta denominación, que es teológicamente correcta).Y entonces, no existe tal "drama" sino en el corazón de los otros católicos que se inquietan mucho por la existencia de estas parejas. Además, usted habla de la "inexistencia de una pastoral adecuada" para tratar estos casos. Sería muy interesante que usted propusiera algún camino y nos regale su opinión en este blog. Su aporte será muy bien recibido, con toda seguridad.Cordialmente,
ResponderEliminarGraciela Moranchel