OPINIONES VALEDERAS

Este comentario nace en una respuesta a nuestro post UN SIMPLE PEDIDO publicado el 04/04/09 y que como comentario hemos enviado a diferentes blogs, con suerte diversa.

Algunos le han dado buena acogida, otros lo han ignorado y algunos han tenido reflexiones que muy poco compartimos y que nos hacen preguntar que parte del verdadero mensaje de la Iglesia aún no han entendido, para que algunos piensen como piensan.

El comentario que transcribiremos, forma parte de los que analizan nuestra situación con amplitud de criterio y entienden tanto la situación como lo que realmente dice la Iglesia.

Nos lo envía desde Arrecife – Lanzarote - Islas Canarias (ESP) Salvador Pérez Ayalon, responsable del blog Yo soy creyente católico quienes nos tienen linkeados desde hace tiempo, aunque nosotros no a ellos, situación que de inmediato procederemos a corregir.


Nos dice:

He leído vuestro comentario en Koinonía en línea y me parecen ejemplares sus actitudes de someterse a los mandatos de nuestra Santa y Madre Iglesia.

Sin embargo, no debemos perder nunca de vista que los mandatos de la Iglesia son los mandatos del SEÑOR y la Iglesia nada puede cambiar, pues desde ese momento dejaría de ser fiel al SEÑOR y al Magisterio de la Santa Madre Iglesia.

Sólo hay una Verdad y esa la tiene el SEÑOR.

¿Qué pasaría si diésemos lugar a que cada cosa fuese interpretando a la manera de cada uno?

Habría que buscar las razones más profundas y en el Magisterio están, del por qué nuestro SEÑOR lo ha querido así.

No pretendo abrir ningún debate, porque no soy yo quien para decir nada ...

... pero el SEÑOR ha dejado un camino y a su Iglesia, asistida por el ESPÍRITU SANTO, la potestad de conducirnos por Él.

Pensemos que lo que pueda pasarnos con respecto al matrimonio, se puede repetir por segunda vez, pues nadie está preservado de ese riesgo, luego: ¿que pasaría?

Cada vez que fallamos, uno de los dos, ¿tendríamos que volver a empezar con otro u otra, que a su vez ha tenido esa mala experiencia, o no?

Volveríamos a empezar a hacer la torre de Babel y no nos entenderíamos, pues al final todo quedaría según la verdad de cada uno.

Y sólo hay una verdad.

Una verdad que, como en estos días celebramos, muchos no quisieron ver, ni quieran verla y se desmarcan haciendo las cosas como ellos lo interpretan o creen.

Y esto no lo digo por ti, ni por ninguno de ustedes.

En primer lugar, no los conozco; en segundo lugar, no sé sus situaciones, y en tercer lugar sólo comento mi opinión de forma general y cada uno que tome el camino que crea, sólo proclamo desde mi fe que el Camino, en nombre de JESÚS, lo marca la Santa Madre Iglesia, como tu dices, y no hay otro, pues sólo uno es el Verdadero: nuestro SEÑOR JESUCRISTO.

Un fuerte abrazo para todos en XTO.JESÚS.


COMENTARIO

1) Hemos accedido a tu comentario por una gran casualidad, ya que como lo enviaste a la dirección de nuestro blog de pruebas, al que sólo entramos cuando queremos ensayar algo nuevo y este no era el caso, pero por algo llegamos, y estamos contentos de haberlo hecho.

2) El hecho que hayas leído nuestro comentario en otro blog, pone de manifiesto que a pesar de los comentarios deletéreos que hemos recibidos, no ha sido una idea tan mala, de no haberlo hecho, quizás nunca te hubieras enterado.

3) Nos alegramos inmensamente por tu amplitud de criterio, por tu comprensión y por tu humildad para tratar el tema y por tu juicio de valor al analizar no lo que hacemos, ni como lo hacemos, sino por lo que sentimos.

4) Compartimos contigo que carecería de sentido y de valor que hubiera una iglesia a la medida de cada uno, aunque te diremos que ante tantos fundamentalistas y fariseos que creen que no sólo que el Cielo les pertenece sino que tienen las llaves del Reino y como porteros de una discoteca, tienen derecho a decir: este entra, este no entra, dan la sensación que se han convertido en cultores del Evangelio según San Yo.

5) Puedes abrir cuantos debates apetezcan, mientras que quienes opinen distinto, lo hagan con convicción, respeto, sentido cristiano y sin hipocresía, ya que eso le dará valor a nuestra fe y permitirá ser cada vez mejores y más merecedores de la Resurrección.

6) Con relación al tema del matrimonio, obviamente que compartimos tu opinión, aunque con algunos matices, ya que todos los que hoy vivimos en nueva unión, es que porque no hemos podido cumplir el sueño del “hasta que la muerte los separe” y los que hemos tenido la inmensa suerte de formar nuevas familias y seguimos activos en nuestra fe, no somos acreedores de ninguna consideración especial, ni buena ni mala.

7) Aunque no podamos asegurarlo, tenemos la sensación que nadie en su sano juicio ha roto su matrimonio sacramental y ha formado una nueva unión, con la finalidad de desagradar a Dios o para convertirse en mártires por no poder acceder a la Eucaristía.

8) Desde nuestra situación, acatamos lo que la Iglesia nos dice, promovemos el cumplimiento de todas las limitaciones, defendemos el sometimiento al Fuero Externo, educamos a nuestros hijos en la fe, muchos participamos en pastorales, en movimientos de Iglesia, en la vida de las parroquias y de la Eucaristía nos unimos íntimamente a Dios mediante la Comunión Espiritual, todo esto sin dejar de soñar con que algunas mentes se abran, algunos corazones se ablanden, algunas procesos en los Tribunales Eclesiásticos se acorten y que quienes creen que levitan, pongan los pies en la tierra, que es el verdadero lugar por el cual deben moverse los seres humanos.

9) Para finalizar, nuestra esperanza y nuestro vivir, está muy relacionado con la convicción de la verdadera e infinita Misericordia, mientras tanto, por todo eso es que celebraremos el 1º Domingo de mayo el Día Internacional de los Católicos Separados- Divorciados en Nueva Unión, unidos en una oración intima y silenciosa que, quizás , resuene en 40 países.