Hace un tiempo que venimos cambiando opiniones con Daniel Mora, responsable del blog Somos más que dos, de San Juan (Puerto Rico)
Nuestros blogs están linkeados y lo hemos invitado a que participe activamente de La Barca, ahora nos a enviado un mail respondiendo a nuestra invitación.
En su mail, nos cuenta sus muy interesante ocupaciones y nos plantea una serie de preguntas, que nos ayudan a abrir los ojos, en un enfoque diferente a los que hasta ahora hemos tratado.
Sus interrogantes son mucho más que eso, son un verdadero desafío a nuestro compromiso y es una verdadera opción de vida.
Las opiniones podrán ser o no coincidentes, pero es innegable que la profundidad nos debe llevar a un necesario examen de conciencia.
Nos dice:
Quiero contarte que he estado bastante ocupado, con mi maestría y sobre todo, con el inicio del prenoviciado en la Compañía de Jesús, estas dos actividades han estado ocupando todo mi tiempo y por eso no he podido responder a tu ofrecimiento de colaborar en "nuestro blog".
Acepto, y quizá no me quede mucho tiempo, pero ahora tengo acceso a mucha información, que si bien no es escrita por mi, si hace parte de mi sentir, pero sobre todo son documentos de personas que llevan demasiados años trabajando por Dios, por sus hermanos y por la Iglesia.
Además estos documentos se verían muy bien difundidos en LA BARCA.
Quiero felicitarte por la cantidad de visitas que se han recibido, y decirte que eso significa que ha valido la pena este esfuerzo, que se esta caminando el sendero correcto
.
Siempre debemos estar más abiertos no tanto a pedir, como a ofrecer.
¿Qué tienen los divorciados en nueva unión que ofrecerle al mundo? ¿Qué tienen que ofrecerle a la iglesia?
Ustedes tienen tanto amor y experiencia que no sólo aportan a la Iglesia, sino que como bautizados son imprescindibles.
Quien más puede enseñarle a un matrimonio joven sobre los posibles errores, sino aquellos que han sufrido perdidas, porque, en la ciencia, detrás de las derrotas está el éxito.
Y es justo que su voz se haga oír con respecto a aquellas cosas que no nos parecen justas, y los animo a que lo sigan haciendo y desde ahora cuéntenme entre sus filas, porque el Señor está ahí entre ustedes, nunca se olviden de eso.
Dios nos bendiga.
Daniel Mora
www.daniel-mora.blogspot.com
COMENTARIO:
Más allá de nuestra alegría y agradecimiento por la aceptación de la invitación a formar parte de este proyecto, no podemos dejar de estacar algo que nos plantea Daniel y en sus preguntas.
Tiene mucha razón al elevar a la categoría de duda su planteo, realmente ¿estamos dispuestos a dar la Iglesia y al mundo algo de nosotros?
Aunque la respuesta inicial es simple y casi seguramente mayoritariamente afirmativa, el conflicto surge a continuación.
Resulta difícil dar a quien se niega sistemáticamente a recibir, ¿acaso en los necesarios cursillos prematrimoniales se convoca a divorciados en nueva para ayudar con sus experiencias, doblemente enriquecedoras?
Esto me trae a la memoria el discurso de JFK cuando dijo:
No preguntes que puede hacer tu país por ti, pregúntate que puedes hacer tú por tu país.
Nuestra respuesta es: ¡mucho! ¡¡¡ Muchísimo !!! Sólo hay que ver SI NOS DEJAN.
Le escribo por este medio, sin complejos ni pre conceptos pueriles, con la casi plena seguridad que Usted nunca llegará a enterarse del contenido de la presente, salvo que algún piadoso villenense, estudiante de doctorado, o algún otro visitante ocasional de la Santa Sede se la haga llegar, pero como decía un Santo nacido en Barbastro (Huelva): “Haz lo que debas, a...unque debas lo que hagas” y a eso vamos.
Me tomo el atrevimiento de dirigirme a Usted desde las antípodas del pensamiento (futbolísticamente hablando, obvio, aunque estemos en la B Nacional, Huracán, existe) tal como lo hice hace más de 10 años y en ese momento para mi sorpresa tuve una respuesta elocuente, nada de palabras huecas, nada de dilaciones estériles, actos concretos, hechos reales.
Bastó una Audiencia casi inmediata con el Obispo Auxiliar a cargo de la Pastoral Familiar en la Redonda de Belgrano y si no hubiera sido por mi cruzada del charco, seguramente desde varios años esa idea hubiera tomado cuerpo, hubiera visto la luz y, quizás, hoy muchos nos sentiríamos partícipes de un muy interesante ámbito de reflexión y contención.
Como no le di las gracias en su momento, tarde pero seguro, aprovecho la oportunidad para hacerlo. Nobleza obliga.
También le escribo desde el conocimiento, casi en primera persona, de sus apoyos a un hermoso y colorido movimiento, nacido en Palma de Mallorca y difundido en todo el mundo, con relación a una apertura muy acorde a los tiempos, aunque por razones estatutarias (obviamente modificables) no hayan considerado posibles sus sugerencias, ha sido otra verdadera lástima.
Se podría haber brindado contención y felicidad a muchos, pero las cosas son como son y quizás en el futuro la apertura, el aggiornamiento y la comprensión sean elementos que algunos puedan tener en cuenta y seguramente contarán con el respaldo de quienes corresponda.
Imagino, sin demasiada inteligencia, que el camino que deberá recorrer será cualquier cosa menos fácil, que como dice San Lucas en su capítulo 10, "la mies es mucha y los obreros pocos", al menos los que estén realmente dispuestos a poner cada cosa en su lugar, pero al aceptar la decisión del Cónclave eso ya lo sabía, así que ahora sólo resta hacer y confiar en la Divina Providencia.
Su estilo claro, cercano, agradable será un buen elemento para "caminar, edificar y confesar" como magistralmente nos ha señalado el derrotero y es dable creer que por esa huella será un desafío alucinante caminar, sin necesidad de demasiadas cosas extras.
Los temas siempre pendientes son muchos, todos importantes y según con quien uno hable o que periódico lea parece que todos necesitan una respuesta inmediata, ejemplarizante en algunos casos y de estricta justicia en otros, pero realmente cada cosa deberá esperar su turno y esa Iglesia a la medida de cada uno, esa Iglesia que reivindique al Evangelio según San Yo, esa Iglesia inmediatista del Llame Ya, es una Iglesia que no existe y que seguramente no existirá, así que no se preocupe, mientras tanto ladrarán y esa será la señal inequívoca que cabalgamos.
A pesar de todo me atreveré a llamar su atención en un tema que a varios, diseminados por todo el mundo, nos ha tocado la lamentable situación de romper nuestros matrimonios y en algunos casos la bendición de tener una nueva posibilidad y hemos encontrado en la Exhortación Apostólica Familiris Consortio una luz de esperanza, aunque luego de más 30 años de esa hermosa Encíclica de SS Juan Pablo II, quizás algo más se pueda hacer, tal como se ha planteado en varios Sínodos.
El acceso a los Sacramentos es pan de vida y bebida de salvación y aunque cueste creerlo, son muchos los famélicos que verían con sumo agrado que de una manera concreta se los tuviera en cuenta y para eso contamos con Usted, con su comprensión, con su cordialidad, con su buen hacer y recordando a San Mateo (7.7) resuena en los oídos, en el cerebro y en los corazones aquello de:”Pedid y se os dará; buscad y hallaréis; llamad y se os abrirá” y esto renueva la ilusión y esperanza, esa segunda virtud teologal que algunas veces el ajetreo de lo cotidiano nos hace olvidar.
La Comunión Espiritual es reconfortante, es un paliativo hermoso, es un acto de cercanía que hace vibrar el cerebro y que acelera las pulsaciones, pero convengamos que no es lo mismo ni mucho menos y de eso pueden dar testimonio elocuente quienes a lo largo de los años se quedan de rodillas en los reclinatorios, con rostros compungidos y dolor en el corazón.
Sabemos que el camino será largo, que los obstáculos se multiplicarán a cada paso, que entre las urgencias de unos y la laxitud de otros algunas cosas se podrán complicar, pero también sabemos que si bien no hay rosas sin espinas, quizás algún día podamos decir que no hay espinas sin rosas.
Me despido con la inconmensurable convicción que: Cristo, cuenta contigo y nosotros con su Gracia.
Dios guarde a Su Santidad
Mundy ya está corregido el feed del Rincón de YANKA.
ResponderEliminarGracias por tus avisos...